lunes, 31 de enero de 2011
La Ira
He presentado este pecado encarnado en el cuerpo de una mujer en una postura bastante dinámica que evoca la idea de que corre hacia algo o alguien, y que a su vez sostiene un cuchillo en una mano que no concuerda con las dimensiones del cuerpo para darle énfasis a esa parte del cuerpo que, junto con el rostro, definen la ira. El vestido no es parte de la fotografía de la modelo sino que está pegado encima, lo elegí también debido a la forma de los volúmenes del mismo, que transmiten de una manera más evidente el movimiento del cuerpo.
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